El precio de este tratamiento es orientativo, basado en el promedio publicado por los especialistas en Esteticas.com.ar. Puede variar según la clínica, el paciente y/o la complejidad de la intervención.
Primer turno: El paciente es sometido a una revisión, en donde se determina el origen del problema y se hace un pequeño análisis sobre cómo debería ser el trabajo odontológico a realizar.
Estudios: Por recomendación del especialista, se lleva a cabo un estudio de la boca y se realiza una plantilla para la fabricación del implante. Cada implante debe ser personalizado.
Tratamiento: Se procede a probar el implante, o en caso de ser uno permanente, este es instalado por el dentista especializado.
Seguimiento: Cada cierto tiempo, el paciente debe hacerse un seguimiento de su condición bucal. Por lo general, esto debe llevarse a cabo por lo menos una vez al año. Estos turnos de seguimiento se cobran por separado.
La gravedad del caso. Ten en consideración que los implantes se cobran por unidad, esto quiere decir que, si, por ejemplo, una persona pierde varias piezas dentales, el valor total del tratamiento será mucho más costoso que si la persona pierde un solo diente. Además, debes tener en consideración el material usado para la fabricación del implante, además del tipo de este, ya que los implantes móviles son más económicos que los fijos.
Los implantes dentales son procedimientos únicos, que no pueden ser fácilmente comparados con otros. Pero, si buscamos un procedimiento odontológico que busque mejorar el aspecto de la sonrisa, podríamos mencionar los implantes de carilla, los cuales buscan blanquear los dientes y armonizar el aspecto de estos por medio de la implantación de carillas de porcelana. Este procedimiento tiene un costo promedio de 800 USD.
Esto va a depender mucho del tipo de Obra Social a la que te encuentres afiliado. Algunas instituciones consideran que este tipo de procedimiento son netamente estéticos, por lo que se abstienen de cubrirlas. Por suerte, hay otras instituciones que lo ven como lo que realmente es, un proceso para garantizar una mejora en la calidad de vida del paciente, por lo que si cubren el proceso por completo o de forma parcial.
La mayoría de centros de estética dental cuentan con programas de financiación autónomos o en colaboración de instituciones financieras, que cubren el valor total del procedimiento y luego le cobran al paciente cuotas mensuales con tasas de interés competitivas. Otra opción es financiar el tratamiento por medio de tarjetas de créditos, esta última se caracteriza por ser la más sencilla, ya que no requiere de papeleo.
Aunque es cierto que el precio es importante, no es lo único que debes tomar en cuenta a la hora de elegir el lugar o profesional que va a realizar el tratamiento. Lo ideal sería que sepas las credenciales académicas de tu dentista y, si es posible, que busques referencias de otros pacientes que fueron atendido por este. Además, debes validar el estado de las instalaciones del centro odontológico, además de su ubicación.