El precio de este tratamiento es orientativo, basado en el promedio publicado por los especialistas en Esteticas.com.ar. Puede variar según la clínica, el paciente y/o la complejidad de la intervención.
Primer turno: La paciente es sometida a un diagnóstico por parte del especialista, el cual debe determinar si esta es apta para el procedimiento. Además, se deben hacer exámenes médicos de rutina, como una hematología completa. Los exámenes no se cobran en el total del valor del tratamiento.
La intervención: La paciente ingresa a quirófano. La duración de la cirugía es variable, pero no debería ser de más de 3 horas. En el precio de la cirugía si incluye la anestesia, los honorarios médicos y los instrumentos utilizados.
Postoperatorio: Terminada la intervención, la paciente deberá permanecer por lo menos un día hospitalizada, para luego poderse ir a su casa, en donde deberá tener por lo menos, una semana de reposo absoluto. Cada cierto tiempo la paciente debe ir a turno con el médico para que este valore su recuperación. Los turnos de seguimiento vienen incluidos en el precio de la intervención.
Hay muchos factores que pueden influir en el precio del tratamiento como, por ejemplo: el prestigio del cirujano que va a llevar a cabo la intervención, el tipo de técnica que se va a utilizar (existe una labioplastia láser que es más económica que la intervención tradicional), la ubicación de la clínica y la condición en la que se encuentran sus instalaciones.
Si buscamos procedimientos similares a la labioplastia, encontramos la vaginoplastia, una cirugía femenina, ideada para promover el rejuvenecimiento de la zona íntima. Esta intervención puede llegar a ser un poco más intervencionista, además de contar con precios que pueden fácilmente duplicar el de una labioplastia tradicional. En promedio, el precio de una vaginoplastia ronda los 2.050 USD.
La labioplastia es considerada por la Obra Social como una intervención meramente estética, por lo que no es cubierta. Ahora bien, en caso de que una mujer tenga un problema en su zona íntima, tales como desgarro o una afección que la limite a tener un estilo de vida normal, la Obra Social si está obligada a cubrir el procedimiento que sea necesario para que la paciente tenga una buena salud íntima.
Afortunadamente, muchas clínicas cuentan con sistemas de financiamiento. Debes consultar con tu centro si este dispone de un programa de financiación independiente o tiene colaboración con un banco que otorgue un crédito, el cual será pagado en cuotas mensuales, con tasas de interés anuales. También puedes potar por usar tus tarjetas de crédito como medio de pago.
Recuerda que las cirugías íntimas son algo serio, por lo tanto, antes de elegir al especialista que te va a atender, debes validar que este está certificado para realizar este tipo de cirugías, además, puedes buscar en internet referencias de antiguas pacientes que han pasado por sus manos. Esto también aplica para el centro médico en donde se llevará a cabo la intervención.