Los pezones invertidos son una problemática común que afecta tanto a hombres como a mujeres. Además de ser antiestético para quienes lo padece, pueden ser señal de alarma de una posible enfermedad mamaria. La cirugía resulta ser el tratamiento más eficaz proporcionando resultados definitivos.
Los pezones invertidos carecen de prominencia en relación con el plano areolar y, por lo tanto, se retraen hacia adentro. Además de ser un defecto estético para algunas personas, pueden producir alteraciones a nivel funcional, especialmente para las mujeres en periodo de lactancia, ya que hay mayor inflamación debido a la acumulación de leche. Existe una clasificación de pezones invertidos en función de su prominencia respecto a la aureola y de su reversibilidad:
- Grado I: En este caso los pezones responden a estímulos psicógenos o neurosensoriales como el frío o con el tacto revertiéndose hacia fuera durante unos segundos o minutos. En este caso, la lactancia materna será posible sin problemas.
- Grado II: Los pezones responden con mayor dificultad a los estímulos y vuelven a su estado original en muy pocos segundos. La lactancia puede ser más difícil en este caso.
- Grado III: los pezones no responden a ningún estímulo, estando permanentemente invertidos y, por lo tanto, será extremadamente difícil amamantar, provocando una posible inflamación que puede involucrar a toda la mama.
Cuando las causas son congénitas, los pezones invertidos pueden presentarse desde el nacimiento y son consecuencia de una malformación de los conductos galactóforos que están retraídos o son extremadamente cortos debido a la formación de adherencias.
En otros casos, los pezones invertidos pueden presentar asimetrías tales que requerirán de un diagnostico mas exhaustivo y profundo para descartar un posible cáncer de mama. La mastitis es la causa mas conocida relacionada con esta afección y tiene como consecuencia la inflamación causada por la acumulación de leche.
El postoperatorio de una cirugía mamaria, también puede ser motivo de la aparición de pezones invertidos. Esto tiene que ver con la formación de cicatrices que recién serán visibles tiempo después del procedimiento. La lactancia, por su parte, puede ser otra posible causa.
Resumiendo, las causas de los pezones invertidos pueden ser:
- Congénita
- Cáncer de mama
- Ectasia del conducto mamario
- Infección o inflamación
- Post cirugía mamaria
- Después de la lactancia materna
La realidad es que no existen remedios caseros tan efectivos y capaces de resolver un problema como este. Los especialistas recomiendan confiar en la cirugía plástica ya que garantiza que los resultados no solo sean permanentes sino también seguros.
Mamoplastia correctiva
La mamoplastia correctiva es opción a la que mas se recurre para tratar la afección de los pezones invertidos. Se realiza de forma ambulatoria y con anestesia local. Dependiendo de cada caso en particular se hace una incisión de aproximadamente 1 centímetro, ya sea en el margen de la areola o alrededor del pezón. La incisión es necesaria para alcanzar el tejido fibroso responsable de la retracción del pezón. Se elegirá la sutura correcta dependiendo del resultado final que se desee y la cicatriz dejará de ser visible luego de algunos meses. Si la imperfección no es tan pronunciada se puede optar por utilizar una técnica cuyo objetivo el hacer que los conductos se alarguen para asegurar tanto la sensibilidad del pezón como la posibilidad futura de amamantar. Una vez finalizada la cirugía, se realizará un tipo de vendaje especial para proteger al pezón de la presión del corpiño, durante 2 semanas siendo, recomendado no practicar ninguna actividad deportiva.